Mauricio Macri visitó Rosario, una de las ciudades más difíciles para Juntos por el Cambio, y participó de un acto 360 en el estadio cubierto del Banco Nación ante un auditorio de unas 3 mil personas.

Sin grandes anuncios y sin mención directa a la situación económica, respetó rigurosamente el manual de campaña apelando a la emocionalidad y poniendo el acento en los temas sensibles en la región como el narcotráfico, la inseguridad y sobre todo, la detención del sindicalista portuario Herme Juárez.

"Vamos a seguir dando batalla contra las mafias porque acá hay gente que se cree dueña de este país. Hay gente que se creyó que era dueña de los puertos de Rosario y no, porque es nuestro futuro el que está en juego" sostuvo el presidente en una breve alusión al caso sin nombrar al imputado.

Detuvieron al sindicalista portuario Herme Juárez

Previo al presidente, el candidato a diputado nacional, Federico Angelini, también se refirió a la detención del poderoso gremialista: "Vamos a seguir luchando contra las mafias como la del cordón industrial que se burló de los trabajadores y de los empresarios del puerto. Vamos a meter preso a todos los que hicieron tanto daño a la Argentina".

En cuanto al narcotráfico, el presidente señaló que durante la gestión de Cambiemos se batieron records de incautación de armas y de drogas e insistió en el desbaratamiento de la banda de los Monos por las fuerzas federales.

Esta afirmación ya había generado cortocircuitos con el socialista Miguel Lifschitz ya que en rigor, los Monos fueron detenidos y condenados por la justicia provincial por los crímenes que cometieron. Varios meses después se sumó el procesamiento en la justicia federal por tráfico de drogas.

Macri insistió en adjudicar a su gobierno el desbaratamiento de la banda narco Los Monos, cuando en rigor estos fueron detenidos y condenador por la justicia santafesina. Recién meses después se sumó la condena de la justicia federal.

"Desde el primer día, nos propusimos enfrentar el narcotráfico como nunca antes se hizo porque sabemos, especialmente las madres, lo que significa cuando el narcotráfico entra a tu casa que afecta a toda la familia", afirmó el mandatario.

En su discurso, que no superó los diez minutos, Mauricio Macri suplicó que la gente vaya a votar el próximo domingo porque "se definen muchas cosas" y pidió que Dios lo ilumine ya que se define si "seguimos avanzando o volvemos al pasado o si seguimos batallando contra la delincuencia, el narcotráfico y la corrupción y todo eso lo definimos con tu voto, con cada voto".

"Hoy más que nunca necesitamos que vayan a votar. A votar por el futuro de nuestros hijos y de nuestros nietos. Es la ahora que hay que poner todo", insistió Macri que no contó con el acompañamiento de Pichetto que tiene su propia agenda.

En cuanto a la situación económica, el presidente lo abordó tangencialmente afirmando que "no es fácil hacer estos cambios, vienen las dudas, las angustias, muchas dificultades para muchos argentinos y lo sabemos, pero todo lo que hemos hecho no es en vano estamos creando las bases donde crecer".

Tampoco respondió los señalamientos que le hacen desde la oposición, aunque quiso dejar en claro que no ocultan su imagen en la campaña: "Acá estamos todos los integrantes de este equipo, orgullosos de dar la cara, sin contraindicaciones y sin incoherencias con una sola propuesta para sacar adelante este país".